domingo, julio 29, 2012

El que vela por ti, no duerme.


Estamos viviendo actualmente unos tiempos llenos de muchas circunstancias; que si enfocamos nuestra mirada en ellas, empezamos entonces a dudar, a desconfiar y a preocuparnos. Personas cercanas nos hacen a veces muchas preguntas acerca de situaciones que están en nuestras vidas que aun no han cambiado (Las cuales Dios con su poder en el momento oportuno cambiará) y este cuestionamiento a veces nos hace sentir que realmente no vemos que pasa nada a nuestro alrededor, que no vemos respuestas y puede incluso hasta mermar nuestra fe y colocarnos en un estado de ansiedad, tristeza o desesperación.

Amada prenda, la palabra de Dios dice en el salmo 121 versículo 3: “No se dormirá el que te guarda, y en el versículo 4 continua diciendo: “He aquí no se adormecerá ni dormirá el que guarda a Israel”.

No hay que temer preciosa gema, nuestro padre Dios altísimo te guarda y sabe lo que deseas que el haga, cambie, restaure, sane, traiga. No te preocupes y solo pon tus ojos en esta hermosa promesa: “Que no se dormirá quien te guarda”. Puedes estar tranquila y confiada sabiendo que Dios está pendiente de ti y de tu situación y que pronto correrá las cortinas y podrás ver lo que todo este tiempo él estuvo haciendo por ti.

En el salmo 37 versículo 5 él te dice: “Encomienda a Jehová tu camino, y confía en el y el hará “, ponle en sus manos ahora todos esos deseos, anhelos y planes que tienes y tranquila que el velará por ti y por ellos.

Jehová es tu guardador y su mano esta extendida sobre ti para hacer por ti. Justo ahora el esta trabajando a tu favor; moviéndose a tu favor, abriendo puertas de bendición, cerrando puertas de aflicción, trayendo bendición, trayendo restauración y trayendo las respuestas que tanto has esperado. Solo mantente firme mirándole a él, creyéndole y perseverando en oración y confiando tranquilamente en tu guarda espalda, tu policía, tu amigo, tu marido, tu guía, tu roca, tu fuerza, tu libertador, el que ama tu alma: Jehová de los ejércitos.

Amada mujer: “Deléitate así mismo en jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón”. Salmo 37:4.

Prepárate a ser sorprendida!

Dios te bendice preciosa gema del altísimo.