martes, agosto 14, 2012

¡Creación admirable de Dios!


Las mujeres en muchas ocasiones evitamos tocar algunos temas que por lo regular son los mas cuestionados en nuestras vidas: Que si te casaste o piensas hacerlo, que si tienes bebes o piensas tenerlos, que si fuiste a la universidad o si vas a hacer un curso especial entre otros temas mas. Pero existe uno que realmente a muchas les incomoda y es el tema de la edad, esa pregunta que nos suelen hacer: ¿cuantos años tienes?, la cual muchas veces hemos llegado a evitar porque no deseamos decir nuestra edad.

Pero algo que el señor nos comparte hoy es que muchas veces no deseamos responder diciendo cual es nuestra edad, porque con esa respuesta viene a nuestra mente el cuestionamiento de comparar nuestra edad con todo lo que entendemos que debimos tener ya, pero que no nos ha llegado aún, y lo mejor viene cuando la otra persona al conocer nuestros años de vida; nos cuestiona de cuando pensamos tener algunas cosas que según las consideraciones de ellos ya es tiempo de tener a mano.

Amada princesa, La palabra de nuestro Señor establece en el libro de Salmos 139:16 “Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación: todo estaba ya escrito en tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos”. El Señor tenía ya una especie de record especial de los días de tu vida sobre la tierra, antes de que nacieras, pero lo más hermoso de esto es que ya él te había visto y tenía un completo historial de ti. Los años de los que hoy gozas sean muchos o sean pocos son un regalo de Dios para tu vida; dale gracias por ellos pues son una oportunidad diaria de hacer las cosas conforme el Señor te dirija, son una oportunidad de conquistar, de lograr, de emprender, de hacer. No te enfoques en sacar cuentas de lo que no has logrado y de compararlos con tu edad.

Amada mujer, la edad que puedas tener hoy; sean 20, 30, 40, 50, 60, 70, no representa limite para que realices tu sueños, ni tampoco representa un obstáculo alguno que haga que te des por vencida y vivas sumida repasando historias de lo que no fue, de lo que no tienes, de lo que perdiste, de lo que no conseguiste, de lo que no hiciste. En el salmo 92:10 dice: “Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco”. Que bello, el pondrá nuevos bríos, nuevos deseos en ti y te apartará como joya especial para iniciar; hacer contigo algo sumamente especial y bueno para ti y para todos los que te rodean.

Hay un versículo precioso en filipenses 3:13-14 que dice: “No que lo haya alcanzado ya, pero una cosa algo; olvidando ciertamente lo que queda detrás, me extiendo hacia lo que tengo delante”. Hermoso verdad, amada abre tus brazos y recibe el aire fresco de Jehová que entra al lugar donde estas hoy y te dice: “No eres una vieja, no eres una pobre mujer, no eres un fracaso, no eres una mujer sin propósito, no eres una mujer sin nada especial para dar, no eres estéril,  no eres una flor marchita, no eres una lámpara apagada que ya no puede alumbrar mas, no eres un ser que ya no puede amar, no eres alguien que ya no puede crear, ERES para mi una obra de arte especial, te veo como un cofre repleto de muchos tesoros que puedes compartir, que puedes lucir para que sea visto tu valor, para que puedas ayudar a otros, darle a otros”. No te detengas mujer, pídele al Señor que abra tus ojos y que mas allá de mirar tus canas si es que las tienes, de mirar tu edad; el atraso, perdida de tiempo o estancamiento que crees tener, mires al Dios que está de tu lado que te dice que abras tus manos y permitas que el las llene.

Regocíjate hoy con este hermoso versículo en salmo 139:13-15 “Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre. ¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien!  Mis huesos no te fueron desconocido cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo de la tierra era yo entretejido”.

Que desde hoy digas orgullosa tu edad; pero que tengas la convicción de que eres para Dios: “Creación admirable, una obra maravillosa”. Es hora de que lo sepas, lo guardes en tu corazón, lo asumas, lo creas, lo vivas y tomes el lugar que Dios ya preparó para ti amada mujer. Que logres, tomes, hagas y emprendas todo lo que deseas en Cristo Jesús.

¡Dios te bendice preciosa creación admirable de Dios!