jueves, septiembre 04, 2014

Hoy oremos juntos...


Buenos Días padre mío; Grande y digno eres, precioso Dios! Gracias por un nuevo día junto a ti, gracias por esta casa donde vivo, gracias por mis familiares, gracias por permitirme amarlos y gracias por proveer diariamente la medida de fe que necesitamos para seguir adelante. Gracias por secar nuestras lagrimas y por levantarnos en aquellos momentos de prueba que hemos vivido, gracias por enseñarnos a perseverar cada día confiando en que tu mano nos guía. Gracias señor por ser tu esa agua fresca que ha calmado nuestra sed, gracias por ser esa voz que nos repite que todo va a salir bien y que aun vienen cosas mayores a nuestro favor. Gracias por sustentarnos con la diestra de tu justicia cada día, gracias por ser nuestro padre, amigo, consejero y sustentador en todo tiempo, gracias por ser un fiel amigo y consejero y por ser ese asesor financiero que nos ha ido moldeando y enseñando como administrar tus recursos como fieles mayordomos. 

Alúmbranos Señor para seguir cada día caminando en tu senda, anímanos a no desmayar y a seguir la batalla diaria de ser luz en medio de las tinieblas, de no sucumbir aunque se levanten las mareas, y se persistir en ser discípulos fieles tuyos delante de los hombres que se empeñan en negarte y en no agradarte. Ayúdanos a ser antorchas encendidas que le demos luz y paz al que anda en tinieblas y en sombras de muerte, ayúdanos a levantar al caído, ayúdanos a darle aliento al cansado así como tú nos lo das a nosotros cada día. Ayúdanos a dar por gracia lo que por gracia hemos recibido. Ayúdanos a ser felices con el simple hecho de saberte a nuestro alrededor todo el día, revoloteando como si fueras una mariposita silvestre.

Te amo mi Señor, gracias por llenarme con tu presencia, tú has sido bueno Dios, guarda mi boca de la queja y ayúdame a que de mi boca solo salga una alabanza constante para ti, precioso Señor, eterno salvador y el que ama mi alma. En el nombre de Jesús, amén y amén!!

Cita biblica para este dia: Mateo 10, Jeremias 10:5-6

No hay comentarios: